Da igual lo que trabajes o te esfuerces para conseguir tus proyectos. Si en el fondo de ti no piensas que es posible: no sucederá. Debes cambiar tus Creencias Limitantes.
Por eso con el esfuerzo solo no es suficiente.
Y para ello cuando acompaño a mujeres a conseguir sus metas doy la misma importancia al Esfuerzo que a trabajar la Confianza en si mismas.
Para que un Cambio suceda en tu vida, primero debes creer que es posible
Hay personas que trabajan muy duro cada día y no consiguen sus objetivos. Y se desmotivan por ello. Y acaban abandonando.
Cuando no lo crees posible aparece un agujero en tu tripa por donde se escapa tu energía, motivación e ilusión… Es como llevar una bola de hierro atada al tobillo. Agotador y desmotivante.
Debes cambiar tus Creencias Limitantes
Las Creencias Limitantes son esos «mensajes secretos» que te dices en tu interior.
No valgo. Yo no puedo. No lo merezco. Nunca consigo lo que quiero. No tengo cualidades suficientes…
Y puede ser que tu discurso verbal de cara al exterior sea otro:
No me interesa. A mis años no quiero complicarme. Si me pusiera lo conseguiría, pero es que no me pongo. La felicidad no está en el dinero. Quiero tener una vida sencilla…
Y entonces la confusión será mayor porque habrás extendido una capa de justificaciones sobre tus Creencias Limitantes y será más difícil destaparlas. Solo lo harás si decides ser honesta contigo o si somatizas con ansiedad, apatía, depresión… y entonces decides «meter mano al asunto«.
4 Pasos para cambiar Creencias Limitantes 
- Detecta cuales son los verdaderos cambios que quieres hacer en tu vida. ¿Cuáles son tus objetivos?
- Escucha tu interior y las Creencias Limitantes que te impiden conseguirlos. Y escríbelas: no valgo, no merezco, no lo voy a conseguir nunca, soy mayor, voy a fracasar…
- Sustitúyelas por Creencias Potenciadoras Realistas:
- Si sustituyes «No voy a conseguir mi objetivo» por:
- «Sí voy a conseguir mi objetivo»… NO SIRVE. EL CEREBRO NO ES TONTO. Necesita pruebas.
- Si sustituyes «No lo voy a conseguir» por:
- «Quiero verme a mí misma intentando y disfrutando de conseguir mis sueños»… ES MÁS REALISTA. No has añadido un resultado.
- Si sustituyes «No valgo para ser empresari@» por:
- «Voy a buscar el asesoramiento de personas que me ayuden a serlo»… ES CERCANO A TU OBJETIVO. Y además delegas en otros profesionales.
- Si sustituyes «No voy a conseguir mi objetivo» por:
- Trabaja tu interior. Descubre cuáles son las heridas que hay debajo de esas Creencias Limitantes. Revisa la relación con tus padres y figuras de autoridad en tu infancia. Cada herida trae unos mensajes de dolor.
- Tal vez sufriste rechazo y los mensajes son «no valgo, no merezco».
- Si fue abandono escucharás: «yo no puedo» y abandonarás al primer obstáculo.
- Si es la herida de la injusticia: «no soy suficientemente buena». Creerás que nunca es suficiente.
- Si es la humillación te dirás «para qué intentarlo si voy a fracasar, y qué vergüenza».
- Si la herida es de traición te dirás «tengo que hacerlo todo sola porque no puedo confiar» y acabarás agotada antes de empezar.
El esfuerzo está sobrevalorado
El esfuerzo es importante en la vida. Aunque en mi opinión está sobrevalorado. Parece que todo debe ser difícil y costoso para que podamos merecerlo.
Sin embargo, cuando trabajas tu interior: Las metas están más claras, la motivación sube y la resistencia es menor. Se consiguen buenos resultados con menos esfuerzo. Es como arar la tierra antes de cultivarla.
Y comprobarás cómo el Esfuerzo se sustituye por Aprendizaje y Placer.
Si te esfuerzas y no lo consigues: deja de trabajar tanto y ahora mira hacia adentro.
Aprovecha la oferta al 30% de su precio:
Posts relacionados: Cómo se implanta una Creencia Limitante
Claro que si Miguel. Un Creencia Potenciadora no Realista puede ser tan frustrante como una Limitante. Y al final puede hacer que la persona abandone y se sienta incapaz. Hay que buscar las nuevas creencias con cuidado.
Muchas gracias por tu comentario.
Dori, muchas gracias a ti por tus buenos consejos, son muy valiosos.
Muy buen consejo el que nos traes hoy. Pienso lo mismo, hay que cambiar «el no valgo» por algo que sea realista y que nos convenza a nosotros de verdad, no directamente por un rotundo «sí » que en un momento determinado nos puede venir muy grande y el resultado final sería peor.