Es muy común que nos atraiga en la pareja justamente aquellas cualidades que nosotros “creemos que no tenemos”.
Sin embargo, aquello que admiramos del Otro es esa parte que no nos permitimos sacar de nosotros mismos.
Luego esas cualidades que admiramos en la pareja, están dentro de nosotros. Pero están adormecidas en la Sombra.
Los acuerdos inconscientes
Me resultan curiosas las parejas en las que cuando aparece un problema: uno de los dos parece ser indiferente. Y el Otro tiene una reacción desmedida ante el acontecimiento. Seguramente esta diferencia de actitudes fue la razón de su atracción mutua.
Y ahora es como si se equilibrasen entre ellos y el primero enviase su Rabia al segundo. Y éste último tiene dentro la Rabia de los dos. Acaban pareciendo una pareja formada por un lenguado y una hidra de 7 cabezas, juntos en plena tormenta.
Con el tiempo he empezado a ver cómo existen “acuerdos inconscientes” en las familias, entre madres e hijas, padres e hijos, hermanas, hermanos, etc.
Los grandes enfados que acaban con la extrema culpabilidad de uno de los dos y que terminan por hacer cumplir los objetivos del que “parece la víctima”…
A veces creo que estos enfados también son “acuerdos inconscientes” que provoca la «víctima» para conseguir del “verdugo” aquello que sin enfado no podría conseguir.
La búsqueda de la Sombra en la Pareja
Las diferencias o complementación inicial buscada en la pareja, puede ser motivo de unión durante muchos años.
Si buscas lo opuesto a ti en tu pareja, que sea con la intención de aprender a despertar esa parte tuya que no reconoces todavía, y que está en tu Sombra.
Si te escondes y pretendes que el Otro se haga cargo de su parte y la tuya, acabarás rechazandole. Y no será su responsabilidad únicamente. Será de los dos.
La Responsabilidad es de los dos
Cuanto más aprendo del ser humano, más apasionante me parece. Me produce una gran ternura saber que la mayoría de desacuerdos en la vida suceden por torpeza e ignorancia, no por maldad intrínseca.
Me he pillado a mi misma en alguno de estos “acuerdos inconscientes”, y os aseguro que no lo tenía planeado conscientemente. Ahora me miro con afecto sabiendo que mi comportamiento era la suma de los dos, no solo cosa mía como yo había creído.
Y tú, ¿te reconoces en acuerdos inconscientes con tu pareja, familiares o amigos?.
¿Sí?. Pues ahora que lo has identificado de forma consciente: ¡¡Sal de ahí inmediatamente¡¡.
Esos comportamientos no benefician a nadie e impiden el crecimiento personal. Y todos son perdedores, aunque a priori no lo parezca.
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Si buscas el Opuesto en tus Relaciones de Pareja, que sea para aprender a desarrollar esas cualidades que tienes dormidas.